Los Toros, una forma de hacer política.

Tenzin Gyatso, XIV Dalai Lama del Tibet, región autónoma perteneciente a la República Popular China, desde la clandestinidad ha coordinado numerosas revueltas y ataques contra los interese chinos en su región, primero con el amparo de EE.UU. y después en solitario. Su ambición “guerrera” le ha hecho merecedor del premio Nobel de la Paz del mismo modo lo fue Yasir Arafat por ejemplo.

Guía espiritual del autoproclamado Lamismo o Budismo Tibetano, que representa únicamente al 6% de los budistas pero que ha tenido el mérito de ser, gracias a unas importantes campañas de mercadotecnia, la escuela budista más conocida en occidente.

Fundamentalmente es un líder político en el exilio que lucha por recuperar el poder sobre el Tibet y volver a instaurar el régimen feudal que consiguió mantener hasta los años 50 del siglo XX y por el cual la práctica totalidad de las tierras del Tibet pertenecen a Lama y el pueblo está obligado a servirle.

De unos años a esta parte, gracias a la TV y a la difusión que permiten las nuevas tecnologías el Arte de torear está empezando a popularizarse en China. En esa región del planeta han llegado a organizarse festejos taurinos e incluso hay un proyecto de instaurar unas ferias permanentes en ese país, hecho que se me antoja complicado porque para ello harían falta ganaderías “autóctonas” y las restricciones sanitarias para la cría de ganado son muy rigurosas.

Desde China se han escuchado voces de “aficionados” apoyando los toros el Cataluña tras presentarse la I.L.P. en su contra en el Parlament de Catalunya.

Bien, justo ahora que China se interesa por este Arte, Tenzin Gyatso, de 74 años de edad y quien ostenta el título de Dalai Lama desde sus 5 años, se pronuncia en su contra. En los 70 años anteriores no les aprestado nunca atención, es más se ha reunido en busca de apoyos con reconocidos aficionadosa los toros con S.A.R. Don Juan Carlos I de Borbón, Rey de España.

Como no creo en las causalidades, afirmo que el Dalai Lama es otro personaje más que usa los toros con fines políticos, como todos los antitaurinos que conozco, no hay detrás de sus declaraciones ningún trasfondo animalista.

Ya lo he dicho en “Tercio de Varas” otras veces, nunca veo ecologistas posicionarse en contra de los toros, siempre veo gente con fines políticos. Por favor, dejen de intentar tomarnos el pelo, que tontos aún no somos.

3 comentarios:

  1. Maestro, me parece muy acertado su artículo. Hay mucho oportunista suelto por aquí y también en el Tibet. Un saludo.

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  2. Pamplinas y excusas para no enfrentarse a la inevitable abolición y fin del pingüe negocio. Ah, y el rey matador de osos borrachos no es alteza, sino majestad, tan trasnochado y anacrónico, tan perteneciente a la España Negra personaje y toros.

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  3. Es que en España tenemos una manía de polítizar todo que al final todo se va al traste.

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